Con la estrategia de email marketing terminada y la seguridad de no terminar convertido en spam, el siguiente punto más importante es que tu suscriptor logre abrir tu email y, sobre todo, lo lea.
¿Te has puesto a pensar a cuántos blogs se suscriben las personas diariamente? Es muy probable que ni ellos mismos se acuerden. Por eso, estarías cometiendo un error al pensar que con suscribirse es suficiente para asegurar que lean los emails que mandas.
Recuerda que no eres el único blog al que se han suscrito, ¿tu recuerdas el número de los blogs o newsletters a los que estas suscrito? Multiplica esa cantidad por 2 y tendrás una aproximación al número real.
Piensa en la batalla que se genera en la bandeja de entrada de una persona, todos los blogs peleando para llamar la atención y que su email no sea eliminado. ¿Qué puedes hacer para evitar esto? Estas son tus mejores armas:
1. El remitente
Al momento que llega un correo solo se ven 2 campos:
- Remitente
- Asunto
Es el primer contacto que se tiene con la persona y el momento en el que decide si será abierto o no tu email.
En el remitente las personas pueden reconocer quién envía el mensaje, si no logras que te reconozcan ten por seguro que terminarás en la basura. Lo mejor es no poner nombre de empresa o dominio si es que no es tu nombre. Es importante que utilices tu nombre, puedes agregar tu apellido. Si tu nombre es muy común, te aconsejo que pongas ambas cosas, por ejemplo:
- Juan
- Juan Pérez
- Juan Pérez de Cosmos Magazine
2. El asunto
Este campo es tan importante que te podría asegurar que el 90% del resultado de una campaña de emailing es producto de lo que se escribe en el asunto. Aquí algunos consejos para tu asunto que harán aumentar la posibilidad de que tu email sea abierto:
- Ser lo más explícito posible.
- Busca que sea interesante y atractivo.
- Tiene que despertar la curiosidad del lector.
- Debe mostrar o dar a entender el beneficio del email, pero sin engañar o realizar falsas promesas al suscriptor.
3. A veces menos, es más: evita abusar del HTML e imágenes
Tu primera victoria es el clic del suscriptor en tu mail, superaste el nivel más difícil, ahora tienes que asegurarte que lo lean. Al igual que con las publicaciones o posts, es posible que el lector solo realice un vistazo general y luego salga de tu email.
Muchas personas piensan erróneamente que llenando el email de fotos y efectos o utilizar una plantilla muy elaborada es la solución para que el lector se quede enganchado con el email; sin embargo, esto sólo complica la lectura. Recuerda que las personas no quieren invertir mucho tiempo en un post, esta inmediatez aumenta cuando se trata de emails.
Tienes que ser más directo, darle al lector lo que quiere sin hacerle perder mucho tiempo, no te compliques decorándolo.
4. No escribas como si quisieras vender
Cuando se realiza email marketing o emailing, existen personas que a la hora de escribir se convierten en robots o se transforman en vendedores apasionados. El truco para escribir un email es creer que estás hablando directamente con tu suscriptor como si estuvieran tomándose un café.
Escribe lo mismo que le dirías si lo tuvieras frente a ti. Al inicio se te puede complicar, pensarás que estás siendo muy coloquial, pero justamente necesitas utilizar el mismo lenguaje que ellos para lograr que te lean.
Empieza a borrar:
- Tecnicismos.
- Expresiones elaboradas.
- Párrafos extensos (más de 3 líneas)
- Frases largas.
Recuerda que, en la actualidad, los emails son leídos en su mayoría a través de un móvil.
Debes tener en cuenta que una línea que escribas en tu computador o portátil, equivale a 3 en un dispositivo móvil. Para tu emailing sé claro y preciso.